Los resultados logrados por el partido ultrderechista Alternativa para Alemania (AfD, por sus siglas en alemán) en las elecciones parlamentarias celebradas el domingo en los estados de Sajonia y Turingia son una señal preocupante, según declaró a Reuters el canciller alemán, Olaf Scholz.
"Los resultados para la AfD en Sajonia y Turingia son preocupantes", afirmó Scholz. "Nuestro país no puede ni debe acostumbrarse a esto. La AfD está dañando a Alemania. Está debilitando la economía, dividiendo a la sociedad y arruinando la reputación de nuestro país", añadió.
La AfD ganó las elecciones parlamentarias en Turingia, en el este de Alemania. El partido logró así, por primera vez en su historia, el primer puesto en los comicios regionales.
Mientras, en el estado de Sajonia, el partido quedó segundo con el 30,6 % de los votos, cediendo el primer lugar a la Unión Demócrata Cristiana (CDU), que obtuvo el 31,9 % del apoyo popular.
"Es un éxito histórico para nosotros", afirmó Alice Weidel, colíder nacional de AfD, describiendo los resultados como un "réquiem" para la coalición de Olaf Scholz.
Al conocerse los resultados, simpatizantes de partidos de izquierda salieron a las calles de Dresde, capital de Sajonia, con bengalas y eslóganes antifascistas.