Durante una rueda de prensa en Londres, el secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, condenó la muerte "no provocada e injustificada" a manos de las fuerzas israelíes de la activista estadounidense de origen turco Aysenur Ezgi Eygi, ocurrida la semana pasada en la Cisjordania ocupada, e instó al país hebreo a introducir "cambios fundamentales" en sus operaciones en la zona, recoge AP.
"Nadie debería recibir disparos y ser asesinado por asistir a una protesta. Nadie debería poner en peligro su vida solo por expresar sus opiniones. A nuestro juicio, las fuerzas de seguridad israelíes tienen que introducir algunos cambios fundamentales en su forma de actuar en Cisjordania", aseveró el alto funcionario, añadiendo que se le dejaría claro este mensaje a los miembros del Gobierno israelí.
Las declaraciones de Blinken se dan horas después de que las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) expresaran en un comunicado "su más profundo pesar" por la muerte de Eygi e informaran que, tras una investigación, concluyeron que "es altamente probable que fuera alcanzada de forma indirecta y no intencionada por disparos de las FDI que no iban dirigidos contra ella, sino contra el principal instigador de los disturbios".
El pasado viernes, Eygi, de 26 años, recibió un disparo en la cabeza durante una protesta de carácter semanal por la defensa de los derechos de los palestinos frente a las violaciones cometidas por el Ejército y los colonos israelíes en Cisjordania.
La Autoridad Palestina celebró el día de ayer una procesión fúnebre en su honor en la ciudad cisjordana de Nablús. Por su parte, las autoridades turcas, que también condenaron el asesinato, informaron que están trabajando para repatriar el cuerpo de la joven a Turquía y enterrarlo en la ciudad de Didim, en la costa del mar Egeo, siguiendo los deseos de su familia.