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Campaña de Hollywood contra la guerra israelí en Gaza y "macartismo" por condenarla reúne más de 700 firmas
Mark Ruffalo, Susan Sarandon y Cynthia Nixon están entre los centenares de actores que firmaron una carta abierta en defensa de los palestinos.
La carta abierta de los miembros del Sindicato de Actores de Cine-Federación Estadounidense de Artistas de Radio y Televisión (SAG-AFTRA), lanzada en marzo en rechazo a la ofensiva de Israel en la Franja de Gaza, ha reunido ya más de 700 firmas de los profesionales de la industria, reporta The Hollywood Reporter.
Entre los firmantes se encuentran Mark Ruffalo, Ramy Youssef, Susan Sarandon, Melissa Barrera y Cynthia Nixon. Los actores exigieron que la presidenta del sindicato, Fran Drescher, y otros líderes del gremio insten a un alto el fuego permanente, condenen la violencia contra los periodistas y protejan a los miembros del sindicato que expresan públicamente su apoyo a los palestinos. En ese sentido, denunciaron la "represión macartista" de la industria "contra los miembros que reconocen el sufrimiento palestino".
El actor Amin El Gamal denunció en un comunicado compartido con The Hollywood Reporter que el liderazgo sindical lleva "meses" ignorándolo y recibió llamadas "en voz baja" del personal de la agrupación que le prometía reuniones que nunca llegaron a concretarse.
"Vi ese doble rasero flagrante", afirmó. "¿Cómo se puede lamentar la pérdida de algunos grupos de personas y no de otros, especialmente cuando la membresía es tan diversa? No se puede fingir equidad e inclusión y luego dejar de lado a los miembros más vulnerables", expresó.
Las celebridades y algunos miembros del gremio que han abogado públicamente por un alto el fuego en Gaza lo pagaron con inclusión en las listas negras que cierran el paso en su trayectoria profesional y la pérdida del empleo. Un actor de la costa oeste de EE.UU. denunció bajo condiciones de anonimato que fueron objeto de una campaña coordinada de acoso.
"Recibimos una avalancha de correos electrónicos llenos de odio, algunos de productores muy conocidos. Temía por mi carrera y por la seguridad de mi familia", dijo. "Es el deber de nuestro sindicato protegernos de este nuevo macartismo, sobre todo cuando defendemos los derechos humanos y a nuestros compañeros de trabajo. En lugar de eso, ha habido un silencio ensordecedor", lamentó.
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