El exsecretario de Seguridad Pública de México Genaro García Luna, declarado culpable en 2023 en EE.UU. por corrupción y narcotráfico, acusó al presidente Andrés Manuel López Obrador de tener supuestos vínculos con líderes del narcotráfico.
"Es del conocimiento público y está en los registros oficiales de México y EE.UU. los contactos, videos, audios, fotografías, registros de comunicación y gestión entre el actual presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, y sus operadores con los líderes del narcotráfico y sus familias", destacó en una carta enviada a la prensa desde una cárcel en Brooklyn.
Y continuó: "En particular con los narcotraficantes que fueron utilizados como testigos en mi contra durante el juicio, quienes inclusive durante el juicio imputaron al presidente López Obrador y a sus operadores de estar vinculados con ellos y el narcotráfico".
Según García Luna, todo ello "fue corroborado" por Ismael 'El Mayo' Zambada, líder del Cártel de Sinaloa, en una carta que publicó y en la que señaló los supuestos nexos "del actual gobierno con él y el narcotráfico".
El exfuncionario, condenado en EE.UU. por colaborar con el cártel de Sinaloa, aseguró que los fiscales de su caso usaron "información falsa proporcionada por el gobierno de México" y no presentaron "una sola prueba o evidencia que acreditara los delitos" por los que fue acusado. "Mi honor está intacto. Yo no he cometido ningún delito", sostuvo.
"Es un tema político"
García Luna enfrentó cinco acusaciones: tres por conspiración internacional para exportar cocaína y otras drogas a EE.UU. a través de sobornos que le pagaba el Cártel de Sinaloa; otro por delincuencia organizada; y uno más, por haberle mentido en 2018 a un agente federal de inmigración.
Según el Departamento de Estado de EE.UU., el exfuncionario recibió, entre 2001 y 2012, millonarios sobornos por parte del Cártel de Sinaloa a cambio de protección.
Sus declaraciones no pasaron desapercibidas. La presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum, desestimó las acusaciones: "Es falso, es un tema político. El presidente nunca ha estado involucrado con nada que tenga que ver con relación con algún delincuente, entonces es absolutamente falso", declaró a la prensa.
García Luna, un ingeniero mecánico nacido en 1968 en un barrio popular de la Ciudad de México, mutó a rico e influyente funcionario durante los dos Gobiernos del conservador Partido Acción Nacional (PAN).
El expresidente Vicente Fox (2000-2006) lo nombró director de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), en tanto que con Felipe Calderón (2006-2012) se convirtió en secretario de Seguridad Pública, cargo que lo consolidó como uno de los funcionarios más poderosos del país.
Su trayectoria pública estuvo permanentemente rodeada de escándalos, ya que ejerció presupuestos multimillonarios, produjo montajes televisivos para presumir una falsa eficacia, controló los servicios de inteligencia y lideró la "guerra contra el narcotráfico" que promovió Calderón, lo que desató la peor crisis de violencia en la historia del país.
La sentencia de García Luna, que se enfrenta a una condena de entre 20 años y cadena perpetua, será anunciada el 9 próximo de octubre en la Corte del Distrito Este de Nueva York, en Brooklyn.