El estado de Carolina del Sur (EE.UU.) aplicó la pena de muerte de un recluso mediante inyección letal por primera vez en 13 años, reportan medios estadounidenses. Fue ejecutado Freddie Owens, de 46 años, condenado en 1999 por matar a la dependienta de una tienda durante un atraco.
Carolina del Sur tuvo problemas con el suministro de inyecciones letales durante unos 10 años, pero en agosto de este año dijeron las autoridades locales que se había restablecido el acceso a ellas.