El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aseveró que a pesar de las sanciones contra su país, que causaron la pérdida del 99 % de los ingresos petroleros, la nación suramericana ha podido recuperarse, pese a que se trató de "misiles" lanzados con el objetivo de destruir la economía venezolana.
"Aquí no se cerró una escuela, no se cerró un centro de salud. Eso sí, fueron golpeadas, porque [las sanciones] son como misiles. El misil cae aquí y golpea a todo su círculo de impacto", ilustró el mandatario en un encuentro con el con el Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST), de Brasil.
En ese orden, Maduro habló de las pruebas que ha tenido que pasar el país tras la imposición de medidas coercitivas por parte de EE.UU. como mecanismos de presión para deponerlo.
"Hemos pasado por tiempos de mucho sufrimiento y dolor, amenazas. Hemos pasado pruebas inimaginables de las que salimos airosos, pero nadie se puede quedar a contemplar las victorias y tenemos que buscar nuevos y buenos aires".
El "milagro"
El presidente venezolano también hizo mención al llamado "milagro" económico en su país luego de que el Ejecutivo elaborara un plan para generar ingresos a través de la producción más allá del petróleo, para dejar atrás una histórica inflación anualizada de 130.060 % en 2018.
"Las sanciones nos hicieron perder el 99 % de los ingresos [...] en medio de la pérdida, echamos andar la Gran Misión Agrovenezuela", que fue diseñada por la administración del fallecido presidente Hugo Chávez, pero que se sometió a una "reingeniería" durante la pandemia, en 2020, y se relanzó en 2022.
Según las cifras económicas que maneja el Ejecutivo, por primera vez en 120 años de explotación petrolera —que trajo consigo un modelo económico rentista— el país ha generado 100 % de sus alimentos.
La Vergareña
El presidente venezolano también habló del proyecto La Vergareña, en el estado Bolívar, fronterizo con Brasil, que abarca más de 10.000 hectáreas y que contempla un plan socioproductivo para esa zona. La iniciativa contará con la participación de campesinos venezolanos y la colaboración del MST.
El jefe de Estado expresó que espera que esa iniciativa "se convierta en un ejemplo para la producción de conciencias de valores y de alimentos", como parte del "esquema de economía social altamente productiva".
En su intervención, se refirió a las fórmulas estatistas en su "peor concepto", que fueron aplicadas con anterioridad en el país, y "que no permitieron el despliegue de las fuerzas productivas".