WSJ: Zelenski tuvo una "fría recepción" durante su visita a EE.UU.
El líder del régimen ucraniano, Vladímir Zelenski, tuvo una "fría recepción" por parte de la Administración Biden durante su visita de la semana pasada a EE.UU., adonde viajó en busca de más apoyo para "contener a Rusia", lo que expuso sus "limitadas opciones" en un conflicto que dura ya dos años y medio, señala un artículo de The Wall Street Journal.
Así, a pesar de los esfuerzos de Zelenski, que se reunió con una serie de políticos estadounidenses para promocionar su denominado "plan de victoria" —conseguir más armas y garantías de seguridad por parte de Washington—, los funcionarios de la Administración Biden "expresaron escepticismo y dijeron que querían más detalles", indica el medio.
Además, el presidente Joe Biden rechazó la principal solicitud de Zelenski, que buscaba recibir permiso para poder atacar con misiles de largo alcance suministrados por Washington objetivos en el interior del territorio ruso. El diario neoyorquino afirma que Biden se negó a levantar dichas restricciones de uso a las armas que suministra a Kiev "por temor a que tal medida pueda intensificar el conflicto con Rusia".
Lo único que consiguió el líder del régimen ucraniano del mandatario fue otro paquete de ayuda militar de casi 8.000 millones de dólares, acordado previamente, y promesas de más apoyo de parte de la vicepresidenta de EE.UU. y candidata presidencial demócrata, Kamala Harris.
"Un peligroso camino" hacia "objetivos lejanos"
El hecho de que Zelenski se ve obligado a "luchar" para obtener un "apoyo significativo" de Washington, que hasta momento ha sido "el principal patrocinador extranjero" de su régimen, señala a que Kiev tiene "un peligroso camino por delante", apunta el artículo.
El medio explica que las tropas ucranianas se encuentran en "la situación más grave en meses en el principal campo de batalla en el este", ya que las Fuerzas Armadas de Rusia las superan en armas y número de militares. Además, el periódico destaca los avances del Ejército ruso a lo largo de toda línea del frente, de casi 1.300 kilómetros, y sobre todo hacia la ciudad de Krasnoarmeisk, rebautizada por las autoridades ucranianas en 2016 como Pokrovsk, la cual describe como un "centro logístico ucraniano clave".
Al concluir, el medio observa que si Zelenski no consigue "un aumento importante" de la ayuda militar occidental, su "objetivo declarado" de recuperar todo el territorio controlado actualmente por las fuerzas rusas "parece ser lejano".