El Ministerio de Minas y Energía de Colombia ordenó el lunes la suspensión de la venta de electricidad a Ecuador, en un momento en el que los dos países se encuentran sumidos en una crisis energética.
Se trata de una medida transitoria con el objetivo de garantizar el suministro para la demanda nacional, motivada por el bajo nivel de los embalses que alimentan las centrales hidroeléctricas del país. Ecuador, por su parte, lleva semanas realizando cortes programados de luz que alcanzan hasta las diez horas diarias, también damnificado por la sequía que afecta a sus instalaciones generadoras de electricidad.