La Casa Amarilla, sede de la Cancillería de Venezuela, fue iluminada con los colores de la bandera de Palestina, como homenaje a los 75 años de lucha "contra el proyecto colonial y genocida de Israel", informó en su canal de Telegram el canciller Yván Gil.
"En honor al valiente pueblo de Palestina, que lleva más de 75 años luchando contra el proyecto colonial y genocida de Israel, respaldado por EE.UU. y Europa, hemos iluminado la Casa Amarilla con los colores de su bandera, que algún día ondeará libre en su tierra", reza el mensaje.
El pasado 7 de octubre, a propósito del primer aniversario del inicio de los bombardeos de las Fuerzas de Defensa de Israel contra la Franja de Gaza, motivados, a su vez, por un ataque del grupo islamista Hamás que se saldó con unas 1.200 personas asesinadas y más de 250 tomadas como rehenes, se instaló en Caracas una tribuna cultural antisionista y antifascista, en solidaridad con el pueblo palestino.
En ese contexto, la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América –Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), demandó el fin inmediato de las hostilidades y su secretario general, Jorge Arreaza, consideró que "la causa única de todos los muertos en Palestina, en Israel, en Siria, en el Líbano, es la ocupación ilegal de los territorios palestinos" y no "el terrorismo islámico", como se asevera desde otros espacios.
Por su lado, el presidente venezolano, Nicolás Maduro, calificó a Palestina como "la patria humana" y aseveró que su liberación representa "la batalla más importante que tiene la humanidad".
En una extensa intervención televisada, el mandatario calificó de "guerra de exterminio" y "genocidio" los ataques israelíes contra el enclave palestino, al tiempo que tachó de "inviable", "demencial" y "criminal" el proyecto guerrerista del primer ministro israelí Benjamín Netanyahu, en tanto "ha llevado al desprestigio la lucha" que emprendió el pueblo judío para sobrevivir tras haber sido víctima del "exterminio" perpetrado por los nazis.