El ex secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, reveló en su entrevista con el diario Politico que las negociaciones con los aliados occidentales sobre el suministro de armas a Ucrania fueron las más difíciles en sus 10 años al frente de la Alianza Atlántica.
"Trabajé duro para intentar convencer a los aliados de la OTAN de que hicieran más, de que proporcionaran más ayuda militar, más entrenamientos. Algunos aliados lo hicieron, pero fue relativamente limitado, y eso fue muy complicado durante muchos años porque la política en la OTAN era que la propia OTAN no debía proporcionar ayuda letal a Ucrania", aseveró Stoltenberg.
Asimismo, aseguró que si los Estados miembros de la Alianza Atlántica hubieran proporcionado más ayuda a Ucrania, se habría podido evitar el desencadenamiento de la crisis ucraniana. Sin embargo, añadió que "es una visión retrospectiva e hipotética, por lo que nadie puede decirlo con certeza".
De acuerdo con Stoltenberg, las negociaciones entre los aliados se llevaron a cabo entre 2014 y 2022, pero no tuvieron éxito. "Si [antes] hubiéramos enviado algunas de las armas que empezamos a suministrar después del 2022, habríamos evitado la guerra, en lugar de [ahora] apoyar los intentos de Ucrania de defenderse", concluyó.