Un reciente informe del Bank of America recomienda el oro como un refugio seguro para enfrentar los vaivenes de la economía de EE.UU., en especial en momentos de inflación y devaluación de la moneda.
De acuerdo con los analistas de la entidad, volcarse hacia ese metal puede ser incluso más beneficioso que hacerlo hacia los bonos del Gobierno, debido a los desafíos fiscales y las tendencias económicas mundiales. Según explicaron, mientras la caída de las tasas de interés real generalmente ayuda al oro, en este momento incluso las tasas más altas pueden no ser perjudiciales, lo que refleja cambios en el comportamiento del metal precioso con respecto a las variables macroeconómicas.
Frente a este contexto, los especialistas del Bank of America estiman que los inversores, incluso los bancos centrales, deberían invertir en el oro, ya que consideran que les permitirá cubrirse frente a las variaciones de la inflación y la pérdida del valor de la moneda ante la creciente deuda pública.
"Ni Kamala Harris ni Donald Trump parecen priorizar la consolidación fiscal", escriben los analistas, que creen que el oro podría alcanzar los 3.000 dólares por onza en 2025.
Agregan que "con las persistentes preocupaciones sobre las necesidades de financiación de Estados Unidos y su impacto en el mercado de bonos del Tesoro, el metal amarillo puede convertirse en el activo de refugio seguro por excelencia".
El oro ha estado en alza este año, ganando más de 30 %, gracias a factores como la caída de las tasas de interés, las compras de los bancos centrales y, más recientemente, el interés de los inversores minoristas estadounidenses. El jueves, los precios del oro volvieron a subir, ganando 0,6 % para llegar a 2.707 dólares la onza.