Hezbolá afirmó haber bombardeado en la mañana de este miércoles la base israelí Glilot, situada en las afueras de Tel Aviv, con una andanada de cohetes. La base alberga la unidad de inteligencia 8200 de las Fuerzas de Defensa de Israel.
El ataque se perpetró en apoyo de los palestinos en la Franja de Gaza y "en defensa del Líbano y de su pueblo", anunció el movimiento chiita en un comunicado. Por su parte, los militares israelíes no han confirmado impactos contra su base, pronunciándose hasta el momento solo de la exitosa intercepción de dos cohetes de largo alcance lanzados desde el territorio libanés hacia Tel Aviv.