Rusia ensaya un ataque nuclear masivo en respuesta al ataque similar de un enemigo

En los ejercicios participan las fuerzas terrestres, navales y aéreas de la fuerza de disuasión estratégica del país.

El ministro de Defensa de Rusia, Andréi Beloúsov, ha declarado este martes que, durante los ejercicios de las fuerzas estratégicas de disuasión nuclear, lanzados por el presidente ruso, Vladímir Putin, se ensayaron las tareas para realizar un ataque nuclear masivo en respuesta a un ataque nuclear enemigo.

"De acuerdo con el plan de entrenamiento de las FF.AA. de Rusia […], se está llevando a cabo un ejercicio de dirección de las Fuerzas Armadas de la Federación de Rusia, en el marco del cual se ensayarán las tareas de lanzamiento de un ataque nuclear masivo de las fuerzas ofensivas estratégicas en respuesta a un ataque nuclear enemigo", declaró Beloúsov al presidente ruso.

Por su parte, el jefe del Estado Mayor de las FF.AA. de Rusia, Valeri Gerásimov, comunicó al presidente ruso que, en estos ejercicios, participan:

Desde el Ministerio de Defensa de Rusia se detalló que, durante en los ensayos de disuasión nuclear, se realizó el lanzamiento de un misil balístico intercontinental Yars desde el cosmódromo estatal de pruebas Plesetsk, situado en la provincia de Arjánguelsk, hacia el campo de pruebas de Kurá (Kamchatka, Lejano Oriente Ruso).

Además, el submarino de misiles estratégicos nuclear Kniaz Oleg, de la Flota rusa del Pacífico, lanzó un misil balístico Bulavá desde el mar de Ojotsk.

A su vez, el submarino misilístico nuclear Novomoskovsk, de la Flota rusa del Norte, lanzó un misil balístico Sinevá desde el mar de Barents.

Al mismo tiempo, en los ejercicios, tomaron parte los aviones de largo alcance Tu-95MS, que realizaron lanzamientos de misiles de crucero en el aire. Todos los misiles alcanzaron sus objetivos, resumieron desde la cartera rusa.

Este 29 de octubre, el presidente ruso lanzó los ejercicios de las fuerzas estratégicas de disuasión nuclear desde el centro de coordinación del Kremlin. Putin subrayó que el uso de armas nucleares es una medida de último recurso para garantizar la seguridad del país, y que Rusia no va a verse arrastrada a una carrera armamentística. No obstante, el país mantendrá sus fuerzas nucleares al nivel de "suficiencia necesaria", aseguró.

En este contexto, anunció que las fuerzas rusas estratégicas de misiles serán transferidas a nuevos sistemas con mayor precisión y capacidad de superar las defensas antimisiles.