El Gobierno de China ha presentado este miércoles una queja ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) tras la decisión de la Unión Europea de aumentar los aranceles a los vehículos eléctricos chinos, en medio de una incipiente guerra comercial entre el bloque y el gigante asiático.
El Ministerio de Comercio chino expresó que "no está de acuerdo ni acepta" la decisión de la UE de implementar esta política comercial. "China seguirá tomando todas las medidas necesarias para salvaguardar resueltamente los derechos e intereses legítimos de las empresas chinas", afirmó el portavoz ministerial, citado por Xinhua, tras presentar la queja ante el mecanismo de solución de disputas de la OMC.
Aumento de las tensiones comerciales
Tras la conclusión de una investigación antisubvenciones, que comenzó el año pasado, la Comisión Europea publicó este martes una resolución final que declara la aplicación de aranceles del 17% para los coches fabricados por el gigante BYD, del 18,8% para los de Geely y del 35,3% para los de la empresa estatal china SAIC.
Otros fabricantes de vehículos eléctricos en China, incluidas empresas occidentales como Volkswagen y BMW, estarían sujetos a aranceles del 20,7%. Por su parte, Tesla tendrá una tasa del 7,8%.
Las tarifas adicionales entrarán en vigor este miércoles y durarán 5 años. "Al adoptar estas medidas proporcionadas y específicas tras una investigación rigurosa, defendemos las prácticas justas del mercado y la base industrial europea", declaró Valdis Dombrovskis, vicepresidente de la Comisión Europea y jefe comercial del boque. "Damos la bienvenida a la competencia, incluso en el sector de los vehículos eléctricos, pero debe estar respaldada por la equidad y la igualdad de condiciones", agregó.
La Comisión Europea acusa a Pekín de aumentar su participación en el mercado de autos eléctricos de la UE con la ayuda de subsidios a lo largo de la cadena de producción. Las ventas de este tipo de coches fabricados en China aumentaron del 3,9% en el 2020 al 25% en septiembre del 2023, da cuenta la institución.
Quejas dentro del bloque
No obstante, la medida comercial ha encontrado oposición en Alemania, que es la mayor economía del bloque y una importante industria automotriz.
Al respecto, Hildegard Müller, jefa de la asociación de la industria automotriz alemana, VDA, expresó que los nuevos aranceles son "un revés para el libre comercio global y, por lo tanto, para la prosperidad, la preservación de empleos y el crecimiento de Europa", al tiempo que aumenta el riesgo de un conflicto comercial de largo alcance. "Los desafíos deben resolverse mediante el diálogo", enfatizó, citada por AP.
China abierta a negociaciones
En una línea similar, el Ministerio de Comercio chino abogó por resolver los conflictos comerciales a través de negociaciones y agregó que estaba llevando a cabo una "nueva fase de consultas" con el bloque europeo.
"Esperamos que la parte europea trabaje con China de manera constructiva […] y alcance una solución aceptable para ambas partes lo antes posible para evitar una escalada de fricciones comerciales", afirmó.