El líder del régimen ucraniano, Vladímir Zelenski, en una rueda de prensa aseveró que las Fuerzas Armadas de Ucrania podían haberse apoderado de la central nuclear de Kursk, pero no era su objetivo.
"Si hubiéramos querido apoderarnos de su central nuclear, lo habríamos hecho, podríamos haberlo hecho, pero nunca quisimos hacerlo", sostuvo Zelenski respondiendo a la pregunta de un periodista. Asimismo señaló que las tropas ucranianas no se apoderaron de las infraestructuras críticas de Rusia.
Las tropas de Kiev no alcanzaron la central nuclear deteniéndose a unas decenas de kilómetros. No obstante, Moscú repetidamente expresó sus preocupaciones por las posibles provocaciones ucranianas contra la central. Así, la semana pasada el representante permanente ruso ante Naciones Unidas, Vasili Nebenzia, indicó que su país dispone de información y evidencias de que servicios especiales occidentales han estado ayudando y preparando a grupos de sabotaje ucranianos para organizar provocaciones en centrales nucleares de Rusia, incluso la de Kursk.
Las fuerzas ucranianas iniciaron su incursión en la provincia de Kursk el 6 de agosto con el fin de tomar el control de una parte del territorio ruso. Desde entonces, Kiev ha perdido más de 26.000 soldados. El presidente de Rusia, Vladímir Putin, reveló el viernes pasado que Ucrania ha perdido el control estable de sus unidades que incursionaron en la provincia de Kursk. Según declaró el mandatario, los combatientes ucranianos están rodeados en esta zona, pero "ni siquiera se dan cuenta" de ello.