La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, firmó este miércoles el decreto que permitirá que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y Petróleos Mexicanos (Pemex) vuelvan a quedar bajo el control del Estado.
"Es una reforma que, en una parte muy importante, le devuelve al pueblo las empresas que siempre fueron del pueblo", afirmó la mandataria en conferencia de prensa.
De esta forma, explicó, se da marcha atrás con la reforma energética que en 2013 llevó a cabo el expresidente Enrique Peña Nieto y que, en los hechos, implicó la privatización de CFE y de Pemex.
"Al convertirlas en 'empresas productivas' del Estado en realidad hacían que dejaran de ser públicas y se convirtieran en empresas privadas", aseguró.
También recordó que esta nueva reforma en materia energética ya fue declarada constitucional, lo que permitirá que, después de que se publique en el Diario Oficial de la Federación, y en un plazo de 180 días, se modifiquen las leyes de la CFE, de Pemex y de la Industria Eléctrica.
Por otra parte, Sheinbaum aclaró que en ambas empresas habrá espacio para la inversión privada, lo que quedará establecido con certeza en las leyes secundarias.
"Nuestro compromiso es que serán empresas operadas eficientemente y brindarán servicios, combustibles y electricidad para todas y todos", prometió al insistir en que esta reforma será fundamental para el desarrollo nacional y la soberanía energética.