Escándalo diplomático tras altercado entre la Policía israelí y funcionarios franceses en Jerusalén

La Policía israelí detuvo a dos miembros del Consulado de Francia en el antiguo santuario de Eleona.

El ministro de Exteriores de Francia, Jean-Noël Barrot, ha cancelado este jueves su visita programada a un antiguo complejo eclesiástico en Jersusalén luego de que las fuerzas de seguridad israelíes irrumpieran en el recinto y detuvieran a dos funcionarios franceses. Los miembros del Consulado francés en Jerusalén detenidos por la Policía israelí fueron puestos en libertad solo después de la intervención de Barrot.

Ubicado en el monte de los Olivos con vistas al casco antiguo de Jerusalén, el recinto alberga las ruinas de la iglesia bizantina de Eleona y es del dominio nacional de Francia desde antes de la creación del Estado de Israel. Construida por los Cruzados, quienes creían que fue allí donde Jesús enseñó el Padre Nuestro, fue posteriormente adquirida por la princesa Héloïse de la Tour d’Auvergne, y en 1874 el santuario fue confiado a las monjas carmelitas francesas.

"Este recinto no solo le ha pertenecido a Francia durante más de 150 años, Francia ha garantizado su seguridad y mantenimiento con enorme cuidado", subrayó Barrot, indignado por el actuar de la Policía israelí que irrumpió en el patio de la iglesia.

"Este ataque a la integridad de un dominio puesto bajo la responsabilidad de Francia corre el riesgo de debilitar los vínculos que, de hecho, he llegado a cultivar con Israel en un momento en que todos necesitamos avanzar en la región en el camino hacia la paz", afirmó ante la prensa.

El Ministerio de Exteriores de Francia condenó el actuar de los agentes del país hebreo y aseveró que va a convocar al embajador de Israel en los próximos días. "Sin autorización, la Policía israelí entró en el recinto portando armas. El ministro no quiso visitar el recinto en estas condiciones", declaró en un comunicado, denunciando que "dos miembros del personal del Consulado General de Francia en Jerusalén fueron detenidos por la Policía israelí a pesar de ser funcionarios con estatus diplomático".

"Como ha declarado el ministro, estas acciones son inaceptables. Francia condena firmemente estas acciones, haciendo especial hincapié en el hecho de que se produjeron en un contexto en el que Francia está haciendo todo lo posible para trabajar en favor de la desescalada de la violencia en la región", manifestó la Cancillería.

Por su parte, la Policía israelí aseguró que los franceses permanecieron detenidos durante unos 20 minutos y fueron liberados tan pronto como los identificaron como empleados del Consulado francés en Jerusalén. Agregó que todos los ministros extranjeros en visitas oficiales a Israel tienen asignados guardias de seguridad israelíes para sus viajes y que la logística de la visita de Barrot se había acordado de antemano.

"Dos personas que se encontraban en el monasterio, en un principio no identificadas, intentaron impedir que el personal de seguridad de Shin Bet [agencia de seguridad de Israel] asignado al ministro llevara a cabo sus funciones negándoles la entrada al lugar", afirmó.