"Moriremos aquí en nuestras casas": Espeluznante testimonio de la hambruna en el norte de Gaza

Vecinos del extremo norte del enclave sospechan que los israelíes los quieren matar de hambre para despoblar la zona, reportó AP.

Decenas de miles de palestinos están cerca de la hambruna en el extremo norte de la Franja de Gaza bajo el asedio israelí debido a que "prácticamente no se permite el ingreso de alimentos a la zona", según denuncia AP.

La población está consumiendo las últimas existencias de lentejas y harina para sobrevivir, en medio de los bombardeos que no cesan y mientras algunos ponen en riesgo sus vidas aventurándose a buscar latas con alimentos entre los escombros de las casas destruidas. Muchas personas "hambrientas y delgadas partieron tambaleándose" hacia la ciudad de Gaza, donde encuentran que la situación no es mucho mejor.

Un hospital informa haber atendido a miles de niños que padecen desnutrición y una nutricionista comentó que había tratado a una mujer embarazada que pesaba tan solo 40 kilos.

La agencia recogió el testimonio de un vecino local cuya familia consta de ocho miembros, Mohammed Arqouq, que afirmó: "Nos están matando de hambre para obligarnos a abandonar nuestras casas". No obstante, él está decidido a quedarse en el norte y esa es su forma de resistencia a Israel. "Moriremos aquí en nuestras casas", declaró al reportero de la agencia.

Los trabajadores sanitarios advierten que el hambre aumenta hasta alcanzar proporciones terribles, debido al asedio, mientras el movimiento Hamás se ha reagrupado en la zona y ha emprendido varios ataques relámpago desde túneles y edificios bombardeados. 

El viernes, expertos de un panel que supervisa la seguridad alimentaria dijeron que la hambruna es inminente en el norte o que puede que ya esté ocurriendo.

EE.UU. calculó que Israel debe permitir el ingreso de un mínimo de 350 camiones al día que transporten alimentos y otros insumos. La realidad es que entró en Gaza una media diaria de 57 camiones en octubre, según datos oficiales israelíes. En la primera semana de noviembre, este número aumentó a 81 al día en promedio, aunque la ONU sitúa la cifra en 37 camiones diarios desde comienzos de octubre y advierte que las operaciones bélicas y la anarquía general impiden a menudo recoger los suministros, por lo que quedan atascados cientos de camiones en la frontera.