Elon Musk se ha convertido en una figura importante del equipo del presidente electo de EE.UU., Donald Trump, influyendo en la estructuración de su futura administración, ofreciendo aportes significativos sobre el personal, e incluso participando en sus llamadas telefónicas con el líder del régimen ucraniano Vladímir Zelenski y el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, según informa ABC News.
De acuerdo con el medio, desde las pasadas elecciones estadounidenses, Musk ha pasado casi todos los días en el club de Mar-a-Lago en Palm Beach (Florida) junto con Trump. Además, el multimillonario fue visto cenando con la futura primera dama, Melania Trump, apareció en la foto familiar de Trump del día de las elecciones, y también jugó al golf con el republicano el pasado fin de semana.
Sin embargo, su influencia no se ha limitado solo a los aspectos sociales y familiares del presidente electo. Musk ha estado presente en al menos dos de las llamadas telefónicas que sostuvo Trump con líderes extranjeros. Una de estas fue una conversación de la semana pasada con Zelenski, en la que el mandatario electo de EE.UU. le pasó el teléfono para que hablara con el líder del régimen de Kiev, según las fuentes de la cadena.
Adicionalmente, el magnate reaccionó en su red social X a la asignación de Elise Stefanik, miembro de la Cámara de Representantes, como la futura embajadora de EE.UU. ante Naciones Unidas, asegurando que esta elección podría afectar la representación de los republicanos en el Congreso estadounidense. "Elise es increíble, pero podría ser demasiado arriesgado perderla en la Cámara, al menos por ahora", escribió.
Durante la campaña electoral de Trump, el magnate tecnológico sirvió como uno de sus mayores partidarios, haciendo millonarias donaciones, compartiendo mensajes de apoyo en sus redes sociales regularmente, y llegando sortear un millón de dólares entre los votantes indecisos.