Los países del G7 quieren presionar a China introduciendo medidas restrictivas contra el país asiático, al que acusan de prestar asistencia militar a Rusia, informa Bloomberg citando el primer borrador del comunicado de los ministros de Asuntos Exteriores de los países del grupo, que se reunieron en Italia este lunes.
Según el documento visto por el medio, las naciones del G7 prometen introducir "medidas apropiadas, coherentes con nuestros sistemas legales, contra los actores en China y en terceros países" que están apoyando la "maquinaria de guerra" de Rusia en Ucrania. El lenguaje utilizado en el comunicado en relación con China podría aumentar las tensiones entre los países del grupo y Pekín. Anteriormente, en una reunión celebrada en abril, los ministros de Asuntos Exteriores del G7 pidieron a China que "garantizara" que dejará de apoyar a Rusia con productos de doble uso.
El medio indicó que el grupo quiere tomar medidas enérgicas contra los países que ayudan a Rusia antes de la llegada al poder del presidente electo de EE.UU., Donald Trump, que ocupará el cargo en enero. El republicano se ha mostrado repetidamente escéptico sobre la preservación del apoyo estadounidense a Kiev y prometió alcanzar un acuerdo de paz en Ucrania en 24 horas.
Al mismo tiempo, el borrador del comunicado contiene nuevas medidas restrictivas contra Rusia. En este sentido, los países del G7 prometen "seguir ejerciendo una presión significativa sobre los ingresos rusos procedentes de la energía, los metales y otras materias primas mediante la aplicación efectiva de las medidas existentes y nuevas acciones contra la 'flota fantasma'", embarcaciones que supuestamente se utilizan para transportar petróleo ruso. Además, en el documento el grupo destaca su "compromiso inquebrantable" en la ayuda a Ucrania. No obstante, el comunicado aún puede ser modificado.
Pekín ha negado repetidamente que proporcione armas a Moscú y ha pedido una solución diplomática al conflicto en Ucrania.