Hombres armados a bordo de dos lanchas motorizadas secuestraron a decenas de mujeres y niños, después de que una lancha neumática que transportaba al menos a 112 migrantes que intentaban cruzar el mar Mediterráneo comenzara a desinflarse frente a las costas de Libia, informó el viernes Médicos Sin Fronteras (MSF).
Según la organización, los sujetos armados amenazaron a los migrantes y dispararon al aire, provocando que más de 70 personas saltaran al agua. Poco después, el equipo de MSF a bordo de la embarcación Geo Barents llegó al lugar en aguas internacionales y logró rescatar a 83 hombres y menores, procedentes de Eritrea, Yemen y Etiopía.
Antes del rescate, los tripulantes de una de las lanchas motorizadas, que afirmaron pertenecer a la Guardia Costera de Libia, aseguraron que permitirían a las embarcaciones de MSF trasladar a las 29 mujeres y niños que habían capturado, pero la segunda lancha no siguió estas instrucciones y huyó a toda velocidad. No quedó claro quiénes eran los hombres armados a bordo de esa embarcación, ni que ocurrió con las mujeres y los menores de edad.
MSF afirma que a pesar de haberse puesto en contacto y negociar con el Centro de Coordinación de Libia en tierra, la situación sigue sin cambios. Tras el rescate, el Geo Barents se dirigió a la ciudad italiana de Regio de Calabria, designada por las autoridades como lugar seguro para desembarcar a los supervivientes a bordo.
Mara Tunno, psicóloga a bordo del Geo Barents, relató el incidente en un video, e instó a las autoridades y organizaciones competentes a ayudar a reunir a las familias, subrayando que Libia no es un lugar seguro. Los supervivientes "están en shock, extremadamente cansados y desesperados. Piden constantemente que se les vuelva a poner en contacto con sus familias. También informan de que han sufrido violencia, tortura, malos tratos y condiciones de vida inhumanas en Libia", señaló.
"Las dos lanchas dispararon al aire y al agua para detenernos, nos quitaron todos los teléfonos y el dinero que encontraron. La gente empezó a gritar y llorar. Nos golpearon con la culata del rifle para hacernos callar, y luego mientras nos apuntaban, se llevaron solo a las mujeres y los niños", detalló uno de los hombres rescatados, citado por Tunno.