¿Libertario o peronista? La 'orfandad' política del senador argentino capturado con 200.000 dólares

Tanto el oficialismo como la oposición aprovechan el escándalo para acusarse de corrupción.

La detención del senador argentino Edgardo Kueider, quien trasladaba más de 200.000 dólares en efectivo y sin declarar, provocó una inesperada crisis y una fuerte pelea entre los principales líderes políticos del país, encabezados por el presidente Javier Milei y la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner.

Los escándalos de corrupción suelen ser aprovechados por las fuerzas políticas, pero en este caso se dificulta porque Kueider es un político peronista que se alió con Milei, es decir, que ha navegado en ambos extremos de la polarización política que predomina en Argentina.

En las elecciones de 2018, Kueider apareció en el primer lugar de la lista de candidatos al Senado en el binomio que encabezaban Alberto Fernández y Fernández de Kirchner, pero este año formó su propio bloque parlamentario para apoyar los proyectos legislativos de Milei, quien según versiones periodísticas, le ofreció la embajada de Uruguay.

Desde las primeras horas del miércoles, cuando se confirmó que Kueider había sido detenido en la frontera de Paraguay y Brasil, comenzó un intercambio de culpas, ya que ni el peronismo ni el mileísmo quieren asumirlo como militante propio o una ficha de sus filas.

De manera estratégica, los legisladores que responden a Fernández de Kirchner promovieron de inmediato la expulsión del senador por "inhabilidad moral", ya que ello les permitiría sustituirlo y sumar un escaño en el Senado. Así, tendría garantizados 34 votos, apenas tres menos de los que necesita para alcanzar la mayoría. Para Milei, en cambio, sería una curul menos.

Cruces

La expresidenta también se pronunció y, en un post que tituló "Democracia tarifada", sugirió que el dinero no declarado de Kueider fue el pago que recibió del Gobierno a cambio de votar sus leyes.

En respuesta, Milei afirmó  que Kueider era "un tema del kirchnerismo", en tanto que la vicepresidenta Victoria Villarruel, quien apoyó al senador para que presidiera la Comisión de Asuntos Constitucionales, insultó a Fernández de Kirchner y le recordó su pasado electoral con el detenido.

"Jefa de la Banda, para intentar ensuciar hay que estar mínimamente limpia y usted está más sucia que una cloaca. El senador Kueider entró en su boleta, con su cara al lado y sigue siendo un afiliado del partido que usted preside (…). Su tiempo pasó, deje de hacerle daño a la Argentina", advirtió la vice, sin reconocer que el senador cambió de bando y hoy es oficialista.

Mientras el oficialismo y la oposición siguen debatiendo para tratar de que el escándalo los afecte lo menos posible, la justicia paraguaya confirmó la imputación en contra del senador por el presunto delito de contrabando.

En su primera declaración, Kueider, quien ya arrastra denuncias por presunta corrupción en Argentina, aseguró que no tenía por qué declarar el dinero ya que no era suyo, sino de su secretaria Iara Guinsel Costa, quien lo acompañaba y también fue detenida.