El Ministerio de Justicia de Corea del Sur impuso la prohibición de viajar para el presidente del país, Yoon Suk-yeol, considerado sospechoso de traición, rebelión y abuso de poder tras la breve imposición de la ley marcial el 3 de diciembre, informa Yonhap.
La prohibición fue aprobada inmediatamente tras la solicitud por parte de la Oficina de Investigación de la Corrupción de Altos Funcionarios de Corea del Sur. Además, la Policía no descarta la detención del mandatario. Preguntado por la posibilidad de arrestar a Yoon sin orden judicial, un funcionario policial dijo que sería posible si se cumplen los requisitos necesarios.
Asimismo, la Policía no excluye interrogar a Yoon en persona. "No hay restricciones humanas o físicas para el objeto de una investigación", dijo durante una sesión informativa Woo Jong-soo, jefe de la Oficina Nacional de Investigación de la Agencia Nacional de Policía.
Las autoridades han puesto en marcha un equipo especial de unos 150 investigadores para encargarse del caso.
Por su parte, el exministro de Defensa Nacional, Kim Yong-hyun, fue detenido este domingo en el marco de la investigación sobre la introducción de la ley marcial en el país. Se detalla que el ex alto funcionario fue identificado como uno de los instigadores de los acontecimientos que se precipitaron el martes pasado. El exministro prometió que cooperará activamente con la investigación.