La presidenta de Georgia, Salomé Zurabishvili, aseguró este viernes que no tiene intención de abandonar su cargo cuando expire su mandato.
"Por cierto, no iré a ningún lado, no dejaré a nadie, estoy aquí y estaré aquí, porque este país en este momento necesita una institución legítima, una parte de un gobierno legítimo que realmente sea elegido y refleje la voz de esta sociedad y este país", afirmó la mandataria.
"Soy su representante ante los extranjeros y esto es una especie de legitimidad. También soy su representante en el interior", añadió.
La elección de un nuevo presidente está prevista para el 14 de diciembre. Zurabishvili, que se inclina por Occidente y posee la ciudadanía francesa, no reconoció las elecciones parlamentarias de octubre, ganadas por el partido gobernante Sueño Georgiano. Mientras, el Tribunal Constitucional de Georgia no aceptó la demanda de la mandataria de declarar inconstitucionales dichos comicios. Georgia es una república parlamentaria, en la que el presidente solo tiene poderes nominales.