El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, hizo una parada no anunciada en Irak este viernes para pedir a los dirigentes de ese país que impidan los envíos de armas iraníes a Siria, informa Bloomberg.
Fuentes de la agencia afirman que el jefe de la diplomacia estadounidense se dirigió al primer ministro iraquí, Mohamed al Sudani, para que no permitan que Teherán trasiegue armas a través de Irak, cosa que en la actualidad no sucede. Se señala que la parte estadounidense está preocupada por la situación en Siria y teme que las armas iraníes puedan desestabilizar la situación en el país árabe.
Además, pidió a los dirigentes iraquíes que tomaran "medidas duras" contra los grupos chiitas que periódicamente atacan a los militares estadounidenses en el país.
Doble rasero de EE.UU. ante la situación en Siria
A pesar de la preocupación expresada por la situación en Siria, Washington apoya las acciones militares emprendidas por Israel desde la salida del gobierno de Bashar al Assad.
El jueves, el Pentágono calificó de "autodefensa" la incursión del Ejército israelí en Siria. También el portavoz del Departamento de Estado de EE.UU., Matthew Miller, justificó la toma de territorios sirios en los Altos del Golán por parte de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), argumentando que "a todos los países les preocuparía el posible vacío que pudieran llenar las organizaciones terroristas en su frontera".
Las FDI tomaron el control de la zona de amortiguamiento de los Altos del Golán esta semana. El Ejército del país hebreo justifica sus acciones como actividades de "defensa" para prevenir cualquier amenaza, por lo que "está desplegado en posiciones claves dentro de la zona de amortiguamiento" fronteriza con Siria.