El Departamento de Estado de EE.UU. aprobó el lunes la posible venta a Corea del Sur de un programa de mejora de los destructores clase KDX-II, actualmente en servicio en el país asiático, y los respectivos componentes de logística y apoyo por un valor total de 300 millones de dólares.
Según comunica la Agencia de Cooperación para la Seguridad de la Defensa estadounidense, Seúl pretende comprar unos sistemas avanzados de control de fuego y 'software' actualizado de guiado de armas, así como programas de formación de personal y servicios de ingeniería, técnicos y logísticos.