Arce descarta devaluar la moneda para hacerle frente al "contrabando inverso"

La nación suramericana implementa medidas para frenar la "salida ilegal" de alimentos e insumos de la canasta básica hacia países fronterizos.

El presidente de Bolivia, Luis Arce, descartó este martes ajustar el tipo de cambio de bolivianos a dólares, al considerar que esa medida no pondría fin a las compras masivas de productos de primera necesidad por parte de personas procedentes de países vecinos, que buscan abastecer los mercados de sus lugares de origen con mercancía barata.

Arce, economista de profesión, explicó a la prensa que "cuando un país devalúa su moneda, hace que sus productos sean más baratos aun", por lo que en la situación actual, "si ahora están saliendo" los productos hechos en Bolivia debido a sus bajos precios, "una devaluación […] en realidad empeoraría el caso, porque haría todo mucho más barato para el bolsillo de los extranjeros". "O sea que no sería una solución, sino todo lo contrario", recalcó.

A fin de hacerle frente a la "salida ilegal" de insumos de primera necesidad –actividad conocida localmente como "contrabando inverso"–, entre los que se cuentan aceites vegetales, carnes, arroz o combustibles, La Paz instaló un Comando Estratégico Operacional de Lucha contra el Contrabando, refiere la Agencia Boliviana de Información. A esos efectos, se han desplegado más de 8.000 efectivos militares en las zonas fronterizas.

Por otro lado, el mandatario afirmó que si bien la extracción masiva de productos ha ocasionado escasez en rubros esenciales en los comercios bolivianos, la situación empieza a revertirse, como se evidencia a partir del aumento en la disponibilidad del aceite comestible de soya, cuyo precio, aseguró, empezará a bajar en el corto plazo.