Fiscalía de Perú inicia investigación por presunta red de prostitución en el Congreso

La Fiscalía Especializada en Delitos de Trata de Personas de Lima Centro comenzó una investigación en contra de Jorge Torres Saravia, un dirigente político sospechado de haber montado una presunta red de prostitución en el Congreso de Perú mientras ejerció como jefe de la Oficina Legal y Constitucional, cargo del que fue destituido la semana pasada.

"Se ha dispuesto también que la División de Investigación de Trata de Personas de la Policía Nacional efectúe las diligencias útiles, necesarias y pertinentes para el esclarecimiento de los hechos", señaló la dependencia en un comunicado en el que aclaró que las presuntas víctimas de explotación sexual no han sido identificadas.

El escándalo que sacude a Perú comenzó el pasado 9 de diciembre, cuando la abogada Andrea Vidal, quien trabajaba en el Congreso, fue acribillada mientras viajaba en un taxi. Los sicarios dispararon 40 tiros.

Una investigación del programa televisivo 'Beto a Saber' aseguró que la mujer de 28 años, que se debatía entre la vida y la muerte, reclutaba a mujeres para que fueran contratadas como secretarias, asesoras o administrativas en el Congreso, aunque no tuvieran experiencia, ya que el verdadero fin era que se prostituyeran con los legisladores.

Su jefe era Torres Saravia, un funcionario que hace dos años fue denunciado por abuso sexual, aunque la causa en su contra no avanzó.

Sin embargo, ambos se pelearon en septiembre pasado, por lo que él la terminó echando del Congreso. Por eso, la tesis del programa es que el político sería el responsable del atentado a Vidal, ya que tenía demasiada información sobre la presunta red de explotación sexual. La mujer falleció el martes.

Nexos políticos

El caso salpica de lleno al expresidente del Congreso, Alejandro Soto, ya que la investigación periodística afirmó que él mismo contrataba a las prostitutas que solían acudir a su despacho.

Denuncian una presunta red de prostitución en el Congreso de Perú

Saravia y Soto son miembros de Alianza para el Progreso, el partido conservador que dirige César Acuña, un gobernador que arrastra denuncias por lavado de dinero y corrupción.

En cuanto estalló el escándalo, el presidente del Congreso, Eduardo Salhuana, despidió a Torres Saravia. "Rechazamos categóricamente estos sucesos que afectan la moral, la decencia y la imagen del Congreso de la República", advirtió.

Además, el presidente de la Comisión de Fiscalización del Congreso, Juan Burgos, anunció que se iniciará una investigación interna sobre la presunta red de prostitución que iniciará con el pedido de informes a la Dirección de Recursos Humanos y con la comparecencia de Torres Saravia, quien hasta el momento ha rechazado los cargos con el argumento de que él no realizaba las contrataciones.