Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) lanzaron este sábado un nuevo ataque contra varias ciudades del sur del Líbano, que ha dejado un catastrófico panorama con autos en llamas y edificios reducidos a escombros.
Israel informó que el ataque se dio en respuesta al lanzamiento de varios cohetes desde ese país hacia su territorio en horas de la mañana, acusando a Hezbolá de haberlo perpetrado. El grupo chiita, por su parte, negó tener responsabilidad.
La ofensiva afectó a las ciudades de Tyre y Touline, dejando al menos a siete personas muertas y otras 40 heridas.