La dotación de un sistema lanzacohetes múltiple TOS-1A Solntsepiok de la agrupación rusa Este ha calcinado con misiles termobáricos una posición fortificada enemiga en la dirección sur de Donetsk, según el Ministerio de Defensa de Rusia.
Previamente, un dron de reconocimiento descubrió la posición enemiga reforzada con un sistema de búnkeres, obstáculos de refuerzo y posiciones de tiro que los comandos de asalto rusos tuvieron que superar.
La clave del poder destructivo del Solntsepiok reside en sus proyectiles termobáricos, cargados con una mezcla combustible en forma de aerosol que, al incendiarse, genera una onda expansiva y temperaturas extremas que alcanzan los 3.000 ºC en el epicentro de la explosión.

