Hegseth encabeza una megarreunión de cientos de mandos militares de EE.UU.

La cumbre se celebra en la base del Cuerpo de Marines de EE.UU. en Quantico, Virginia.

El secretario de Guerra de EE.UU., Pete Hegseth, se ha reunido este martes con cientos de altos mandos militares del país en la base del Cuerpo de Marines en Quantico, estado de Virginia.

Hegseth comenzó su discurso comentando el reciente cambio del nombre de su organismo, dándole la bienvenida al Departamento de Guerra e indicando que "la era del Departamento de Defensa ha terminado". En su argumentación, se amparó en una máxima utilizada en su momento también por George Washington: "Verán, el lema de mi primer pelotón era: 'Quien anhela la paz debe prepararse para la guerra'".

"No hay tiempo para juegos"

Al mismo tiempo, manifestó ante los altos mandos que "no hay tiempo para juegos", subrayando que la misión del Pentágono es "combatir, prepararse para la guerra y prepararse para ganar, implacable e inflexible en ese empeño". "El momento es ahora y la causa es urgente", añadió.

A continuación, Hegseth indicó que el Pentágono tiene previsto restaurar y reorientar la base industrial de defensa de EE.UU., la industria de construcción naval y la relocalización de todos los componentes críticos.

"Este momento urgente, por supuesto, requiere de más tropas, más municiones, más drones, más [sistemas de misiles] Patriot, más submarinos, más bombarderos B-21. Requiere más innovación, más IA en todo y, a la vanguardia, más efectos cibernéticos, más contraataques aéreos no tripulados, más espacio, más velocidad", enfatizó, señalando que EE.UU. necesita fortalecerse rápidamente.

"Perdimos el rumbo y nos convertimos en el departamento 'woke'"

Asimismo, señaló que durante la administración anterior, el departamento se había convertido en 'woke'. Prosiguió analizando la importancia de una fuerza de combate sólida, afirmando que las Fuerzas Armadas deben estar dirigidas por los líderes de combate más capaces y calificados. "Nuestros combatientes tienen derecho a ser liderados por los mejores y más capaces líderes", dijo. "Eso es lo que necesitamos que sean", recalcó.

Además, dijo que, bajo su liderazgo, el Pentágono está "poniendo fin a la guerra contra los guerreros" y criticó que sus predecesores promovieran líderes basándose en la raza, las cuotas de género y los supuestos "primeros históricos". "Perdimos el rumbo y nos convertimos en el departamento 'woke', pero ya no", reiteró, culpando a los "políticos insensatos e imprudentes" por centrarse en "las cosas equivocadas". En este sentido, afirmó que su objetivo es reparar "décadas de decadencia".

El secretario de Guerra también anunció que está implementando diez nuevas directivas que involucran aptitud física, nuevos requisitos de cuidado personal y un retorno al "estándar masculino más alto" para las posiciones de combate. "Si ustedes no cumplen con los estándares físicos de nivel masculino para puestos de combate, no pueden pasar una prueba de aptitud física o no quieren afeitarse y lucir profesional, es hora de buscar un nuevo puesto o una nueva profesión", continuó.

Hegseth explicó su decisión de despedir a altos oficiales militares poco después de ser confirmado al frente del Pentágono. "Es casi imposible cambiar una cultura con las mismas personas que ayudaron a crearla o incluso se beneficiaron de ella", dijo, agregando que los mandos despedidos "siguieron al liderazgo político electo". "A toda una generación de generales y almirantes se les dijo que debían repetir como loros la absurda falacia de que 'nuestra diversidad es nuestra fuerza'", declaró.