Moscú desmonta las justificaciones de Francia sobre un petrolero interceptado

Según la vocera de la Cancillería rusa, "con su furia sancionadora, los países de la UE violan descaradamente las normas del derecho internacional".

La portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, María Zajárova, criticó rotundamente las declaraciones del presidente francés, Emmanuel Macron, sobre la reciente detención de un petrolero ruso frente a las costas francesas. La diplomática señaló que la postura del líder francés carece de claridad.

"En este caso, el presidente francés prefiere un lenguaje enigmático. De sus declaraciones no se desprende en absoluto sobre qué base se ha iniciado esta investigación y en qué consisten exactamente las 'graves violaciones cometidas por la tripulación', declaró Zajárova.

Según sostuvo, la única explicación dada por París fue la referencia a la lucha contra una supuesta 'flota en la sombra', un concepto que no existe en el derecho internacional. Al mismo tiempo, Macron reconoció de hecho que las acciones de las fuerzas de seguridad francesas están relacionadas con la imposición de sanciones secundarias.

"Con su furia sancionadora, los países de la UE violan descaradamente las normas del derecho internacional", subrayó Zajárova.

"Cualquier restricción impuesta al margen del Consejo de Seguridad de la ONU, como es bien sabido, constituye una grave violación del derecho internacional".

También señaló que los países de la UE "no dudan en utilizar cualquier medio para crear obstáculos a la libre navegación y convertir determinadas zonas marítimas, concebidas como zonas de paz, en zonas de confrontación, persiguiendo en ellas a quienes no obedecen las órdenes de Bruselas".

Según añadió, el revuelo que se ha generado en torno al incidente persigue objetivos puramente internos: distraer la atención de la opinión pública francesa de la grave crisis socioeconómica que atraviesa el país.

 Contexto del incidente