Apenas siete meses después de asumir el poder, la coalición gobernante de Alemania encabezada por el canciller Friedrich Merz está a punto de colapsar debido a un proyecto de ley sobre pensiones que podría desencadenar otras elecciones, en medio de una fuerte incertidumbre económica, informa Bloomberg.
El Gobierno de Merz enfrenta ahora un problema más, después que 18 legisladores jóvenes del mismo partido del canciller, la Unión Demócrata Cristiana (CDU), se manifestaran en contra del proyecto de ley de pensiones, cuya votación final en el Bundestag (el Parlamento del país) está prevista para este viernes. La coalición gobernante, formada por CDU/CSU y SPD, cuenta con 328 escaños de los 630, lo que le da una frágil mayoría.
El fracaso de la reforma podría significar el fin de la coalición y dar lugar a nuevas elecciones nacionales, justo en momentos en que el partido de ultra derecha Alternativa para Alemania (AfD) lidera algunas encuestas y alcanza un nuevo récord de 27 % de apoyo, impulsado por la ansiedad de la sociedad ante el estancamiento económico. Frente a tal reto, tanto el propio Merz como sus socios socialdemócratas intentan convencer a los votantes de que son capaces de cumplir las promesas de revitalizar el crecimiento, reforzar la seguridad interna y el Ejército del país, entre otras.
"Punto dramático"
Ocurre todo esto mientras grupos industriales acusan al Gobierno de no actuar con la urgencia debida para restaurar la competitividad económica del país. Así, el presidente de la Federación de Industriales Alemanes (BDI), Peter Leibinger, advirtió que los fabricantes de varios ámbitos de la industria, desde la automovilística hasta la química, "están enfrentando un punto bajo dramático" a medida que el año llega a su fin. "La economía está en caída libre, pero el Gobierno no está respondiendo con la suficiente decisión", manifestó, agregando que la ausencia de reformas estructurales efectivas cuesta cada vez más empleos y limita el margen de acción futuro del país.
Tras las elecciones de febrero y la posterior relajación de las estrictas reglas sobre la deuda, el entusiasmo inicial acerca de un posible resurgimiento de la economía europea gracias a Alemania ha disminuido. Recientemente se han ajustado las proyecciones de crecimiento para el año próximo, que finalmente se estiman por debajo de 1%.
Bloomberg informa que la aprobación de la ley podría ser más fácil gracias a la decisión del partido La Izquierda de no participar en la votación. De esta manera, la ausencia de sus 64 diputados disminuiría a 384 el número de votos necesarios para alcanzar una mayoría, cifra que el Gobierno deberá superar. Según dos asistentes a una reunión privada de la CDU, Merz pidió a todos los legisladores que apoyen la iniciativa, alegando la crisis geopolítica actual y advirtiendo sobre posibles "consecuencias drásticas".
Algunos jóvenes miembros del Parlamento expresan su descontento por el aumento de costos y la carga financiera que se trasladará a las futuras generaciones, ya que el proyecto de ley asegura el pago de pensiones en su nivel actual al menos hasta 2031, a pesar de la reducción en las aportaciones de la población activa y el creciente peso sobre las finanzas del Estado.
Si bien los economistas consideran poco probable que la coalición colapse, las repercusiones negativas para la posición del canciller y la estabilidad de su Gobierno son claras.