"¡Qué buena está!": el escándalo sexista en la jura de los nuevos diputados en Argentina

El legislador que presidió la sesión fue criticado por sus dichos mientras tenía el micrófono abierto.

La jura de los diputados electos que asumirán en el Congreso argentino el próximo miércoles tuvo varios escándalos, pero quien se destacó fue el legislador que presidió la sesión debido a sus reiterados comentarios sexistas, reportaron medios locales. En medio de las críticas que recibió, culpó a la tecnología.

Gerardo Cipolini, de 82 años, estuvo al frente de la sesión por tratarse del diputado más longevo que se encontraba en el recinto. Los dichos que generaron polémica comenzaron cuando fue el turno de la jura de la diputada María Graciela De la Rosa. "¡Che, pero qué buena está la peruca [forma despectiva de referirse al peronismo]!", se lo escuchó decir por la transmisión oficial.

Esa misma actitud la repitió en dos oportunidades. Cuando fue el turno de Rosario Goitía expresó: "¿Quién es? ¡Che, qué buena!". Luego, con Mónica Becerra dijo: "¡Che, qué linda!".

Críticas en la Cámara

Las expresiones de Cipolini no tuvieron una inmediata respuesta durante la sesión. Sin embargo, cuando el hecho se hizo viral en las redes sociales, la diputada Cecilia Moreau, de Unión por la Patria, tomó la palabra: "La noticia que está trascendiendo tiene que ver con que el presidente provisional de esta asamblea, el diputado Cipolini, comentó de una de las diputadas 'qué buena que está', o de tres diputadas, y eso está ya en todos los medios de comunicación".

"Algunas se ríen, a algunas no les importa, pero la verdad es que las mujeres somos mucho más que un buen culo, un cuerpo. Somos cabeza, corazón, idea, coraje y perseverancia por nuestro accionar dentro de esta Cámara", dijo y le reclamó a Cipolini que pida disculpas.

La culpa de la "tecnología"

Pese a los cuestionamientos que recibió Cipolini, el diputado no se hizo responsable. "No voy a pedir perdón por algo que no he dicho. De ninguna manera acepto esa imputación", dijo.

Además, explicó que la polémica podría haber derivado de una "tecnología" que "ha avanzado a límites casi inconscientes". "Por ahí uno sale diciendo cosas que no ha dicho", sostuvo. Por último, señaló: "Soy un hombre grande, tengo hijas, tengo nietas, y de ninguna manera me voy a permitir en un escenario totalmente respetuoso una expresión de este tipo. Repudio totalmente los dichos sobre mi persona".