Un donante cuyo esperma se utilizó para engendrar a casi 200 niños en toda Europa es portador de una rara mutación genética que incrementa enormemente las posibilidades de desarrollar cáncer, informa BBC citando una investigación internacional.
El hombre anónimo donó su semen al Banco Europeo de Esperma de Dinamarca en 2005, pero su esperma fue utilizado posteriormente por 67 clínicas en 14 países. Aunque el donante está sano y pasó los controles de selección, una mutación en el gen TP53 —presente en hasta el 20 % de su esperma— confiere a los niños concebidos un riesgo de hasta el 90 % de desarrollar cáncer, una enfermedad conocida como síndrome de Li-Fraumeni.
El caso salió a la luz después de que médicos que atendían a niños con cáncer vinculado a la donación de esperma expresaran sus preocupaciones este año. Se confirmó que al menos 23 de los 67 niños conocidos inicialmente portaban la enfermedad, y diez ya habían sido diagnosticados con cáncer. Asimismo, algunos de los niños ya murieron. En el curso de la investigación se identificaron al menos 197 niños nacidos del donante. "Tenemos muchos niños que ya han desarrollado un cáncer […] Tenemos niños que ya han desarrollado dos tipos de cáncer diferentes y algunos de ellos han fallecido a una edad muy temprana", aseveró Edwige Kasper, la genetista oncológica que presentó los datos iniciales sobre niños afectados.
El donante fue bloqueado inmediatamente una vez se descubrió que presentaba la mutación. El Banco Europeo de Esperma de Dinamarca, que vendió el semen, admitió que en algunos países este se utilizó para engendrar a demasiados bebés, superando los límites nacionales. El incidente expuso los riesgos de un sistema globalizado de donación de esperma con supervisión fragmentada. Mientras organizaciones como la Sociedad Europea de Reproducción Humana y Embriología sugieren un límite de 50 familias por donante, los expertos subrayan que los casos de enfermedades genéticas raras siguen siendo "extremadamente poco comunes".