La portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, María Zajárova, aseguró que cualquier manipulación de los fondos de su país por parte de la UE y sus cómplices no quedará sin una "dura respuesta".
"Todas las consecuencias para la economía mundial serán asumidas por los iniciadores de este esquema fraudulento", señaló Zájarova este jueves durante un encuentro con periodistas.
Asimismo, al ser cuestionada sobre los informes que aseguran que en una reunión de ministros de Finanzas del G7 celebrada este lunes, Japón rechazó participar en los planes de la UE de usar los activos rusos congelados que se encuentran en su territorio para financiar a Ucrania, la diplomática señaló que, tras los comentarios oficiales por parte de Tokio, se ve que Japón no ha cambiado su postura sobre el uso de los activos rusos.
"Los japoneses, como miembros del G7, aprobaron una declaración conjunta en la que se señala la posibilidad de utilizar íntegramente los activos rusos bloqueados para apoyar al régimen de Kiev", recordó.
"Hemos advertido repetidamente a todos, y en particular a los japoneses, que su participación en este experimento ilegítimo con los activos soberanos de Rusia se considerará complicidad en el robo y los crímenes del régimen de Kiev. Tales acciones inevitablemente conducirán a severas contramedidas prácticas, incluidas algunas asimétricas", aclaró la vocera.
A su vez, subrayó que la reacción de Tokio es una confirmación más de que la iniciativa de la UE de "robar las reservas soberanas rusas" es completamente "ilegal" e "ilegítima". A manera de contraste, Zájarova recordó que algunos miembros del bloque comunitario se resisten a esta idea reconociendo que constituye "un verdadero delito".
"Quienes concibieron este plan no se preocupan por los intereses de nadie: ni por los de sus propios ciudadanos, ni por las consecuencias para la región, para Europa Occidental ni para el mundo en su conjunto […] Y lo más importante, no se preocupan por las economías de los países de la UE ni por los riesgos potenciales para el sistema financiero global. Esto es simplemente una orden que, como robots, están ejecutando, destruyendo todo a su paso. Quién pagará por ello, cómo se implementará todo desde una perspectiva de responsabilidad; eso no les preocupa", agregó.
Rusia advierte de las consecuencias del "robo" de sus activos
Desde febrero de 2022, varios países de Occidente (EE.UU., naciones de la UE y el Reino Unido, entre otros) mantienen congelados más de 300.000 millones de dólares en activos estatales rusos. En septiembre, la Comisión Europea planteó otorgar a Ucrania un "préstamo de reparación" de 140.000 millones de euros (162.000 millones de dólares) financiado con los activos rusos congelados.
La semana pasada, la Comisión Europea presentó dos esquemas de financiación plurianual para Ucrania: emisión de deuda en los mercados con garantía del presupuesto de la Unión Europea y un "préstamo de reparaciones" respaldado por los activos soberanos rusos congelados en territorio comunitario. Los líderes del bloque decidirán más adelante este mes si emplear las reservas rusas o los fondos de los contribuyentes europeos.
Bélgica ha reiterado su rechazo a la iniciativa, argumentando que el país podría acabar siendo perseguido legalmente por Moscú. "Si Rusia nos demanda, tendrá todas las posibilidades de ganar en el tribunal", mientras que Bélgica no podrá reembolsar esos cientos de miles de millones, que "equivalen a un presupuesto federal anual", sostuvo el ministro de Asuntos Exteriores del país, Maxime Prévot. Según su previsión, esa perspectiva significaría "la bancarrota para Bélgica".
Rusia ha advertido en varias ocasiones que la congelación de sus fondos viola el derecho internacional y ha tachado de "robo" la iniciativa de la Unión Europea. El presidente Vladímir Putin anunció que su país está preparando contramedidas. "El Gobierno ruso, siguiendo mis instrucciones, está desarrollando un paquete de medidas de represalia en caso de que esto ocurra", declaró a finales de noviembre el mandatario, recalcando que "todos afirman claramente, sin rodeos, que se trataría de un robo de propiedad ajena".