La Presidencia de Sudáfrica rechazó las declaraciones del empresario Elon Musk, quien afirmó que actualmente en el país se aplican más leyes "contra los blancos" que las normas "contra los negros" que existían durante el 'apartheid' (el sistema de segregación racial vigente en Sudáfrica entre 1948 y 1994).
El magnate citó datos del Instituto de Relaciones Raciales británico y sostuvo que esa legislación posterior al 'apartheid' debería abolirse, ya que las leyes de transformación "son profundamente erróneas". Según Musk, el objetivo del país debería ser no tener ninguna norma que haga distinciones raciales, independientemente del contexto histórico.
Respuesta del Gobierno sudafricano
Las palabras de Elon Musk provocaron una dura reacción desde la oficina del presidente Cyril Ramaphosa. Su portavoz, Vincent Magwenya, consideró la comparación con el 'apartheid' ofensiva y racialmente insensible, y recordó que Sudáfrica vivió un sistema de opresión institucionalizada durante décadas.
Magwenya declaró que "solo una persona racista, desequilibrada y sin arrepentimiento no entendería lo doloroso que resulta este tipo de afirmaciones para quienes todavía sufren las consecuencias del 'apartheid'". Añadió que intentar presentar las políticas de transformación y reparación como equivalentes a las leyes de segregación ignora tanto la realidad histórica como las desigualdades actuales.
El portavoz subrayó que muchas personas en Sudáfrica "aún llevan las cicatrices del 'apartheid'" y trabajan a diario para desmantelar las consecuencias del colonialismo y del antiguo régimen, del que —según dijo— se beneficiaron grupos como los que representa Musk.