El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha firmado más órdenes ejecutivas en menos de un año de su segundo mandato que en todo su primer período presidencial, al firmar el lunes su número 221 con la designación del fentanilo como "arma de destrucción masiva", informa The Washington Post.
Según el diario, los decretos presidenciales han permitido al mandatario eludir al Congreso para imponer aranceles radicales o intervenir en temas culturales y económicos.
Al menos un tercio de las órdenes ejecutivas de Trump han sido impugnadas en tribunales. Los jueces han bloqueado varias de ellas, como las modificaciones al registro electoral o las prohibiciones de la atención de transgéneros*, mientras otras esperan revisiones de la Suprema Corte del país.
*El movimiento internacional LGBT está calificado como organización extremista en el territorio de Rusia y prohibido en el país.