Los comandos de las Fuerzas Armadas rusas que buscan y derriban drones kamikaze enemigos recibirán nuevos sistemas antiaéreos, anunció el ministro de Defensa de Rusia, Andréi Beloúsov.
"Seguiremos creando equipos móviles de cazadores, equipándolos con las armas más eficaces, como los misiles de defensa aérea Verba y los sistemas antiaéreos Zubr y Tsitadel", declaró Beloúsov durante una reunión de Colegio del Ministerio de Defensa ruso en la que también intervino el presidente Vladímir Putin.
El desarrollo del sistema de defensa aérea a control remoto Zubr para proteger la infraestructura de vehículos aéreos no tripulados se anunció en 2024. El sistema incorpora un radar con un alcance de detección de 1.500 metros, integrado con un puesto de control y una ametralladora, que puede ser de dos tipos: GShG o PKTM (ametralladora Kaláshnikov de tanques).
El sistema portátil de defensa aérea 9K333 Verba (una versión actualizada del conocido sistema Iglá-S) provisto con ojiva de autoguiado está diseñado para derribar aeronaves, helicópteros, vehículos aéreos no tripulados y misiles de crucero. El sistema superó las pruebas estatales en 2011 y entró en servicio en 2015. La ojiva inteligente del misil es capaz de distinguir objetivos falsos como bengalas de calor.
A su vez, el sistema Tsitadel fue dado a conocer por Beloúsov en agosto de este año. Localiza el objetivo por sí mismo, es atendido por un solo operador que solo debe autorizar el disparo, reveló entonces el ministro sin dar más detalles.