Autoridades de Francia registraron el jueves la casa y oficinas de Rachida Dati, ministra de Cultura del país, por presunta corrupción durante su periodo como miembro del Parlamento Europeo entre 2009 y 2019. El hecho ocurre a pocos meses del inicio de la primera vuelta de las elecciones municipales, donde participará como candidata a la Alcaldía de París, y el último escándalo podría poner trabas a sus aspiraciones.
La investigación judicial inició en octubre de 2025 tras acusaciones en su contra por сorrupción, tráfico de influencias, malversación de fondos, abuso de confianza y blanqueo de capitales.
Lazos de Dati con empresa financiera británica
Mientras Dati era eurodiputada, presuntamente recibió remuneraciones del representante legal de la empresa británica de gestión de activos AlphaOne Partners, Nicolás Sarkis.
El empresario admitió que había pagado a la política "300.000 euros entre septiembre de 2012 y marzo de 2014" y "100.000 euros al año entre 2010 y 2018, como parte de un paquete anual de honorarios por asesoramiento jurídico". Según él, cuando contrató a Dati, desconocía que tenía un mandato parlamentario.
También se identificaron otros pagos de Sarkis a Dati en 2022 y 2023 por una suma total de 50.000 euros.
El caso de GDF Suez
Aparte de estas transacciones, la investigación incluye 299.000 euros que Dati recibió discretamente entre 2010 y 2011 en conexión con la empresa de energía y gas GDF Suez (actualmente llamada Engie), a través de un bufete de abogados.
Según los registros, GDF Suez pagó a Dati dos veces 149.500 euros por medio de la empresa jurídica, cuando era miembro del Parlamento.
Todo ello cobra importancia porque, además, durante su periodo como parlamentaria, Rachida Dati presentó algunas enmiendas y consultas escritas a favor del sector de gas, pero tales actos de influencia son prohibidos para los funcionarios públicos.
La investigación en curso no es la primera que enfrenta la política, pues mantiene otros procesos pendientes con la Justicia francesa, entre ellos, la falta de declaración de lujosas joyas valoradas en 420.000 euros.



