La Administración de Donald Trump protegerá a compañías como Apple ante el problema que representan los nuevos aranceles a los semiconductores chinos para sus costos de importación, al establecer que la aplicación efectiva de estas medidas por parte del Gobierno estadounidense se retrasará hasta 2027.
Según un documento publicado en el Registro Federal de EE.UU., el arancel se hará efectivo el 23 de junio de 2027 y su porcentaje exacto se dará a conocer con un mes de anticipación.
De acuerdo con un portal especializado en las operaciones de Apple, la decisión eliminaría el riesgo a corto plazo de un aumento en los costos de importación para el gigante tecnológico estadounidense.
La compañía, aunque diseña sus procesadores A y M fabricados en Taiwán, depende de proveedores en China para muchos otros componentes, como chips de gestión de energía, controladores de pantalla y de conectividad.
El mecanismo de tasa 0 % funciona como una demora que preserva el marco legal para futuros aumentos, reduce la fricción comercial inmediata y brinda claridad a empresas como Apple para sus decisiones de cadena de suministro a largo plazo, señala el portal.
El momento es crucial para Apple, que continúa sus esfuerzos por diversificar la fabricación más allá de China. Anteriormente, la compañía enfrentó preocupaciones por los aranceles propuestos por Trump y sus costos multimillonarios.
