El informe de 12 páginas obtenido por una organización británica especializada en investigaciones periodísticas, recuenta 75 ataques de 'drones' entre 2006 y 2009 en las zonas tribales de Pakistán.
El documento contabiliza las muertes totales en 746, de las cuales 147 han sido confirmadas como civiles, o una de cada cinco víctimas.
Además, "cerca del 12% de todas las víctimas de este tipo de ataques son menores de edad".
La polémica práctica de realizar ataques antiterroristas con 'drones' en Pakistán empezó en 2004, durante la presidencia de George W. Bush y sigue aplicándose por parte de la Administración de Barack Obama.
Aunque la Casa Blanca sostiene que "los ataques son planeados en profundidad y las muertes de civiles son muy raras", numerosas investigaciones indican lo contrario. Además de acabar con la vida de los terroristas, los aparatos estadounidenses han matado a unas 600 personas inocentes, entre ellas decenas de niños, según las autoridades pakistaníes.