Asustan los datos recién publicados del número de homicidios vinculados con cárteles del crimen organizado en México. Durante la administración del actual mandatario, Felipe Calderón, han sido asesinadas 22.700 personas, a veces en grupos e incluso públicamente.
El canal RT informó a su audiencia sobre varios episodios lamentables -y absurdos-, como aquel en el que fueron fusilados los alumnos que viajaban en una camioneta desde su aldea a un centro distrital para cobrar sus becas. El crimen fue atribuido por las autoridades a un cártel de narcotraficantes pues el modus operandi era típico de esos grupos de delincuentes. Como también es típica la ineficacia policial en todos los casos, quedando aún por determinar a los responsables.
Esta ineptitud policíaca constituye uno de los factores del aumento de este tipo de homicidios. En el 2007, luego de un fin de año en que el presidente lanzó una ofensiva contra los narcocárteles se registraron 2.837 homicidios; para el 2008 la cifra aumentó a 6.844, y en el 2009 llegó a 9.635. Actualmente, en los tres primeros meses del 2010 se han registrado 3.365 asesinatos, lo que permite pronosticar que el número total superará los 10.000 para finales del año.
Desde diciembre del 2006 hasta marzo del 2010 la policía registró 1.286 enfrentamientos con participación del crimen organizado. De este número, 977 fueron dirigidos contra las autoridades y 309 se desencadenaron entre los propios clanes.
Con respecto a esta última cifra, Ricardo Monreal, uno de los senadores del opositor Partido del Trabajo, mencionó “que son muchas las víctimas civiles. En el pasado la sociedad leía las notas y decían que eran sicarios y ahora resulta que eran los mejores estudiantes”.
La Secretaría de Gobernación mexicana aún pretende tranquilizar a la sociedad diciendo: “México está dando su batalla, los centros donde está habiendo repuntes de violencia están bien focalizados, la mayor parte del territorio está en paz y trabajando”, manifestó su titular Fernando Gómez Mont.
El funcionario dispone de otra estadística con las que objeta las acusaciones sobre la descapacidad policial. Así, entre diciembre del 2006 y marzo del 2010 fueron detenidas 121.200 personas vinculadas al crimen organizado, dice Gómez Mont, y esta lucha toca cada día más a los principales clanes de las drogas que constituyen el mayor peligro para la sociedad.