La idea era que fuera un asunto que pasara prácticamente desapercibido, pero salió a la luz: el FBI, la Agencia Federal de Investigación, presionó a distintos proveedores de Internet para que instalasen un programa que permite interceptar los metadatos de los usuarios.
Correos electrónicos, direcciones IP, cuentas de Facebook y el historial de navegación puede ser conocido por las agencias de seguridad a través de este 'software', que escanea los contenidos en tiempo real. Todo esto sin ningún conocimiento del usuario.
Según un artículo de CNET, el FBI ha estado solicitando a proveedores como Verizon, AT&T, T-Mobile, Comcast y Sprint el uso del 'software' creado por la propia agencia.
Los representantes de las firmas de telecomunicaciones no han realizado comentarios hasta el momento.
En tanto, de acuerdo con una declaración, la agencia estadounidense aseguró que cuenta con autorización legal para usar diferentes formas de recolectar datos. Asimismo precisaron que si el proveedor no contaba para este fin con una herramienta tecnológica propia, el FBI podía colaborar utilizando sus propios sistemas para cumplir los autos judiciales de recogida de datos.
El FBI asegura que tiene facultades para realizar este tipo de vigilancia de acuerdo con lo señalado en la 'Ley Patriota'.
Esta ley se promulgó poco después de los atentados a las Torres Gemelas y ha otorgado un gran poder al Estado a través de sus agencias para vigilar a los ciudadanos, y así —según sus defensores— prevenir ataques terroristas.