Los documentos "nos dieron una comprensión profunda de los planes e intenciones de otros participantes de la cumbre y garantizaron que nuestros diplomáticos estuvieran bien preparados para asesorar al presidente [Barack] Obama y a la secretaria [de Estado, Hillary] Clinton", señala Shannon en la nota.
"Estamos frente a un escándalo de proporciones globales; este episodio que ustedes mostraron es algo desmoralizador para la diplomacia internacional", afirmó el ministro de Comunicaciones brasileño, Paulo Bernardo, en referencia a la información aparecida.
Estamos frente a un escándalo de proporciones globales
El semanario apuntó que uno de los objetivos de la Casa Blanca para el encuentro de ese año era presentar a Obama como un líder dispuesto a dialogar con América Latina.
Además, de acuerdo con el funcionario estadounidense, entre los datos mejor aprovechados estuvieron aquellos relacionados con "cómo lidiar con asuntos controvertidos tales como Cuba", y "cómo interactuar con contrapartes difíciles, como el presidente de Venezuela, Hugo Chávez".
"Nuestro Gobierno estaba decidido a construir una relación productiva y positiva con nuestros vecinos, mientras nuestros rivales en la región estaban igualmente decididos a desacreditarnos y avergonzarnos; tuvimos éxito y nuestros rivales fracasaron, y nuestro éxito se debe, en buena medida, a las informaciones abundantes, detalladas y en tiempo adecuado que ustedes nos suministraron", afirma Shannon a Alexander en la misiva.
Estas revelaciones se suman a las que dieron a conocer recientemente el diario británico 'The Guardian' y el brasileño 'O Globo', basándose en documentos filtrados por el exempleado de la CIA Edward Snowden.