La Universidad estadounidense de Virginia Tech homenajea a las victimas de un asalto de un pistolero que dejó 32 estudiantes y profesores muertos y varios heridos hace tres años.
Dos pesados bancos de hormigón, diseñados para contribuir a la reflexión y al recuerdo, se han instalado cerca del monumento a los asesinados por el estudiante Seung-Hui Cho, que abrió fuego en una residencia estudiantil y un aula y se suicidó tras el ataque.
El gobernador de Virginia encabezó la ceremonia de homenaje y leyó los nombres de cada una de las victimas. El acto concluyó con el sonido de 32 campanadas.
Las clases han sido suspendidas y se espera una vigilia con velas al anochecer.