Tajeldine, subraya que "el Gobierno egipcio se fortalece", mientras que la llamada desesperada que hicieron los Hermanos Musulmanes a salir de las calles y volver a sus casas "demuestra su debilidad" y el "rescrebajamiento del grupo".
El analista opina que el derramamiento de sangre en Egipto fue inevitable y que los Hermanos Musulmanes se aprovechan de los actos violentos en Egipto puesto que -dice- "contribuyen a justificar su posición". "De esa forma pretender imponerse nuevamente por la fuerza y con apoyo internacional", comenta Tajeldine a RT.
El fracaso de los Hermanos Musulmanes desepera no solo a los islamistas, sino a EE.UU. que "está tomando la antigua posición de jugar a doble carta".
"Apoyan a la Hermandad Musulmana pero también apoyan a los militares que están en el poder. Una posición hipócrita de los EE.UU. que busca a ver dónde puede obtener una ganancia", sostiene.