Greenwald recibió a su pareja, David Miranda, en Río de Janeiro, donde ambos residen, después de que Miranda fuera retenido durante unas 9 horas en el aeropuerto londinense de Heathrow.
A las preguntas de los periodistas sobre si el incidente detendría su actividad reveladora, Greenwald, columnista del periódico británico 'The Guardian', aseguró que el efecto será el "contrario". "Eso me animará: tengo muchos más documentos para reportar, incluso algunos sobre el Reino Unido, y en eso me concentraré más ahora. Seré más agresivo, y no menos, en mis reportes", dijo Greenwald, quien confirma sus palabras en su cuenta de Twitter.
"Cuando hacen cosas como esta, muestran al mundo su carácter verdadero. Va a ser contraproducente. Creo que van a arrepentirse", añadió el contacto de Snowden sobre la detención e interrogación de Miranda.
El interrogatorio se llevó a cabo bajo el artículo 7 de la polémica Ley de Terrorismo del año 2000, que se aplica únicamente en los aeropuertos, puertos y zonas fronterizas y que permite a los oficiales detener, cachear e interrogar a las personas.
A principios de agosto, Glenn Greenwald anunció que Edward Snowden, perseguido por EE.UU. por revelar su programa de espionaje PRISM y refugiado temporalmente en Rusia, le había entregado unos 20.000 documentos "explosivos".