Este miércoles el director de la Inteligencia Nacional, James Clapper, ha autorizado la publicación de tres dictámenes secretos de tribunales de EE.UU.
Los documentos desclasificados muestran que durante tres años la agencia recogió unos 56.000 correos electrónicos y otras comunicaciones de Internet de los ciudadanos estadounidenses al año.
Según declaró a la prensa un alto funcionario del Gobierno, Clapper ha decidido que “en las actuales circunstancias el daño a la seguridad nacional causada por la liberación de esta información se ve compensado por el interés público".
Los dictámenes muestran que en 2011 la NSA informó al tribunal de que estaba recogiendo accidentalmente las comunicaciones de Internet de los estadounidenses sin relación con el terrorismo, y el tribunal le ordenó que encontrara formas de limitar lo que se recaudaba y durante cuánto tiempo se guardaba.
De acuerdo con Clapper, tras el fallo del tribunal la NSA cambió la forma en que se recogía la información. En 2012, el organismo destruyó lo que había recolectado.
El anuncio de Clapper se produce después de que el excolaborador de la CIA Edward Snowden filtrara miles de documentos acerca de los programas de vigilancia de las agencias de inteligencia de EE.UU.