"Son los agentes de equipos especiales conocidos como SWAT, entrenados con métodos militares, que forman parte de cada vez más departamentos de Policía de Estados Unidos y se destinan incluso a redadas contra objetivos no armados, enormemente distintas de las operaciones de alto riesgo a las que se limitaban en sus orígenes", publica Efe.
Si los entrenamos como soldados y los equipamos como soldados, no deberíamos sorprendernos de que empiecen a actuar como soldados
"Si los entrenamos como soldados y los equipamos como soldados, no deberíamos sorprendernos de que empiecen a actuar como soldados. Y la misión de un soldado es matar al enemigo", indicó Arthur Rizer, un expolicía y exmilitar que ha observado durante años la progresiva militarización de los departamentos de Policía locales.
Dado que una ley de 1878 impide el uso de militares como fuerzas de orden público en EE.UU., el Gobierno concibió "una mezcla" entre ambos estilos para combatir el narcotráfico, según Rizer. Tras los atentados del 11 de septiembre de 2001, Washington aumentó sus fondos para equipos antiterroristas en todo el país.